El Llagar la Morena es uno de los de más remota existencia documentada, ya desde mediados de siglo XIX la familia conocida con el nombre de "casa La Morena" realizaba actividades de ganadería y labranza aquí, elaboraba sidra y regentaba un bar y un estanco.
A principios de siglo XX se construye un edificio, cimiento del actual, que durante algún tiempo sirvió para acoger bailes de salón con música de organillo. Posteriormente el local se convierte en Llagar al que se le denomina "Llagar Nuevo" para diferenciarse del anterior o "Llagar Viejo".
La tradición y la artesanía siguen siendo hoy, cinco generaciones después, la base del proceso propio con el que se elabora la sidra, un proceso que se mantiene fiel al estilo, las técnicas y secretos tradicionales pero que aúna una modernización en las instalaciones y las herramientas, que han provocado que la calidad del producto final sea inmejorable.
La cocina de La Morena se ha regido, desde siempre, por los dos ingredientes fundamentales de la tradición gastronómica asturiana: la CANTIDAD y la CALIDAD.
La carta contempla una amplia variedad de platos de la concina tradicional elaborados con productos de la tierra.
Desde los platos más contundentes como el Pote, la Fabada o los Callos a todo tipo de tapeo, ensaladas, quesos, carnes y pescados.